Por su parte, Cerón (2020) indica que el docente usa las tradicionales herramientas
manuales con un juego geométrico, para realizar representaciones estáticas en la pizarra,
y desarrolla la clase magistral para exponer los temas. Estas metodologías no son
suficientes para lograr una buena comprensión de los temas, pues los estudiantes se
limitan a copiar sin realizar algún análisis o reflexión crítica de la materia (Betancur,
2017). Trabajar en explicaciones en un plano, una materia que debe ser comprendida de
forma espacial, trae dificultades al estudiante y al logro de sus aprendizajes.
En el Ecuador, el Ministerio de Educación (2016) implementó una reforma a la
educación que se sustenta en el modelo constructivista, destacando el valor de las
Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), como un importante recurso para
la educación. Para Bravo y Quezada (2021b) las tecnologías deben ser incorporadas a la
educación como una herramienta que apoya el desarrollo de la clase y refuerza la
comprensión de los temas. De esta forma se impulsa el desarrollo del pensamiento
crítico y el uso de metodologías activas que facilitan el aprendizaje autónomo por parte
del estudiante.
Alfonso y Repetto (2019) explican que el uso de las TIC favorece la motivación del
estudiante y la comprensión de los temas, que muchas veces son abstractos y complejos.
Los programas pueden simular figuras tridimensionales y facilitar su manipulación y su
representación. Como una forma de volver comprensibles e interesantes estos temas,
Fernández (2018) menciona que la enseñanza de la geometría debe girar en torno a
aplicaciones prácticas y del contexto del estudiante, de esta forma los aprendizajes
pueden adquirir significado.
Para García et al. (2020), el uso de software desarrollado para aplicaciones educativas
es pertinente, ya que simulan situaciones semejantes a la realidad y facilitan el
desarrollo de las destrezas relacionadas con el razonamiento lógico y la percepción
espacial que se requiere para el aprendizaje de geometría descriptiva, especialmente si
la educación es constructivista. Sin embargo, Flores et al. (2021) explican que los
docentes deben tener una continua capacitación y actualización en el manejo de
herramientas tecnológicas. En el contexto de la pandemia, muchos docentes debieron
incorporar el uso de recursos y herramientas virtuales, sin tener experiencia previa. Vera
y Yánez (2021) indican que aquellos docentes que usan TIC pueden lograr mayor
motivación, dinámica y participación en sus clases. Esto lleva a un mayor compromiso
de los estudiantes con la asignatura.
Mena (2019) explica que hay programas educativos que facilitan el acceso a diversos
ambientes virtuales de aprendizaje, pues simulan o recrean situaciones muy parecidas a
la realidad y permiten la correlación entre la información y la ejercitación cuando han
sido cuidadosamente planeados. En el caso de la geometría descriptiva estos recursos
permiten al estudiante una mejor interpretación tridimensional de los objetos y la
interacción con ellos, de modo que desarrollan sus destrezas de visualización espacial y
razonamiento lógico (Guirao, 2010).
Para Suárez et al. (2018), existen una serie de opciones para trabajar la geometría; sin
embargo, algunos programas permiten modelar y simular de forma dinámica para
facilitar la comprensión del estudiante. Dado que las instituciones educativas fiscales no
siempre disponen de recursos para adquirir licencias para uso de softwares, por lo que
se buscó utilizar programas de libre acceso. En este trabajo se presentan dos
aplicaciones tecnológicas para desarrollar los temas de proyecciones y vistas de sólidos: