umores@uisrael.edu.ec
REVISTA U-Mores
QUITO-ECUADOR
2024
59
EFECTIVIDAD DE UNA INTERVENCIÓN BASADA EN MINDFULNESS EN PERSONAS ADULTAS MAYORES CON
SINTOMATOLOGÍA DEPRESIVA Y LA SATISFACCIÓN CON LA VIDA
Introducción
Una de las problemáticas que se ha evidenciado en los pacientes que presentan depresión
de acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (2017) es la normalización de los
síntomas. Fernández y Martín (2019) han mencionado que la normalización de la depresión en
personas adultas mayores se confunde como un estado normal del proceso de envejecimiento
de este grupo etario, lo cual es un agravante hacia su estilo de vida y además contribuye a una
disminución de su salud mental.
Según Calderón (2018) la prevalencia de síntomas depresivos en la población adulta mayor en la
región Latinoamericana en general, y en Ecuador en particular, es elevada, por lo que se concibe
como un problema de salud pública. Para Pintado y Castillo (2016) la depresión es una disfunción
mental incapacitante, con un coste económico elevado y sufrimiento preocupante en comparación
con cualquier otro padecimiento de salud mental. Por tanto, se inere que la depresión constituye
no solo un problema psicológico, sino económico debido al costo que implica para el sistema de
salud (Ozamiz et al., 2020).
En Ecuador, la población adulta mayor ha sido dejada de lado, ocasionando que la calidad de vida
de este grupo etario no sea el más adecuado. Aleaga (2018) ha señalado que existen cerca de
987.279 personas de 65 años, en total representan el 7,27% de la población, de las cuales el 50%
presenta algún tipo de discapacidad o vive en la pobreza extrema Estas cifras incentivaron a que
el estado direccione políticas públicas para la atención y rehabilitación; no obstante, al comparar
las acciones frente a las necesidades del grupo etario resulta escaso, en especial la atención de la
salud mental.
Desde la concepción de Arias (2021) la insatisfacción de necesidades emocionales se vinculan
con cinco categorías: pertinencia, autonomía, libertad para la expresión de emociones-deseos,
espontaneidad y autocontrol. Al vincular con el entorno de un adulto mayor, se estima la presencia
de la frustración que altera la estabilidad del individuo. En consecuencia, se incrementa la
percepción de inseguridad, al igual que las expectativas sobre posibles abusos que genera un
estado de desconanza y aislamiento social.
Bajo este contexto, se identicó el problema de investigación que consistió en la falta de
programas y políticas que contribuyan a mejorar la salud mental de los adultos mayores, a
pesar de que existen indicios de la prevalencia de sintomatología depresiva. De tal manera, la
investigación ha resultado pertinente pues la intervención basada en mindfulness constituye una
estrategia para mejorar la calidad de vida de las personas adultas mayores, dado que se plantea
como método para incrementar el bienestar psicológico mejorando la capacidad de regular eventos
estresantes, en especial a nivel de signicado vital (Cebolla et al., 2017).
Al respecto, mindfulness es una terapia que se encuentra dentro de las terapias de tercera
generación y que ha demostrado efectividad en diversos problemas psicológicos, entre ellos la
depresión en diferentes tipos de poblaciones. Franco et al. (2017) ha armado que la aplicación
de mindfulness reduce la depresión geriátrica, así como las condiciones preocupantes,
evidenciando la efectividad de esta técnica de atención o consciencia plena, la cual permite mitigar